Hace ya mucho tiempo que trabajar la imagen y el estilo ha dejado de ser un tema exclusivamente presencial. Todas tenemos, en mayor o menor intensidad, presencia en redes sociales y en el terreno digital, así que cuidar la imagen, también en este ámbito, es esencial para tu comunicación y tu identidad.
¿Cuántas veces has escuchado la frase “una imagen vale más que mil palabras”? Y ahora dime, ¿cuántas veces te lo has aplicado a ti?
Te he hablado en muchas ocasiones de la importancia de la imagen que proyectamos al exterior. Ya no tanto por el “qué dirán”, cosa que solo tiene la relevancia que le queramos dar, sino por el “cómo me voy a sentir”, punto importante para cada una de nosotras. Y es que sentirnos cómodas y en concordancia a lo que somos, nos aporta una seguridad que pocas veces lograremos con otras prácticas.
Dicho esto, hoy me gustaría hablarte de lo importante que es que esa imagen que tan bien has trabajado, y con la que tan a gusto te sientes, vaya acorde con lo que expresas y comunicas en redes sociales.
5 elementos clave para cuidar tu imagen en redes sociales
Quizás esto no te parezca importante si el uso que haces de este medio sea por puro ocio o placer, que también lo es. Pero, ¿qué pasa cuando son las redes sociales tu vía de captación de clientes o de crecimiento profesional? Pues que es muy importante que tu imagen personal vaya en consonancia con lo que proyectas en redes.
Sentirte segura contigo misma, cómoda con la imagen que proyectas y por lo tanto, empoderada, se traduce en tus redes en seguridad y profesionalidad por tu parte, cosa que tu audiencia y tus posibles clientes van a detectar.
- Define tus objetivos y cómo quieres ser percibida, qué quieres trasladar. Tener claro cómo quieres ser vista te ayudará a tenerlo en cuenta en todo momento, te servirá de filtro.
- Muestra tu estilo y tu personalidad de forma coherente y constante.
- Cuida todos los detalles, desde la edición de la foto hasta la elección de los complementos.
- Utiliza el color para destacar, mostrar tu personalidad y sentirte muy tú. Los colores expresan emociones, energía y tienen mucho poder, úsalo a tu favor.
- Cuida la escenografía, tu lenguaje corporal, lo que te rodea. Más allá de la ropa, complementos e incluso tu actitud, cuida también todo lo que aparece en escena para mostrar una imagen cuidada y homogénea.
Párate a pensar un segundo. Cuando navegas por las redes, ¿cuáles son los perfiles profesionales que más te seducen? Estoy segura que son aquellos en los que la imagen es cuidada y va acorde con lo que se comunica. Mostrarte en redes como profesional, freelance y con una marca propia conlleva cuidar tu imagen, porque en este caso es cierto que “una imagen vale más que mil palabras”.
Estar segura de lo que eres y de tu potencial debe traducirse en una imagen cuidada y que proyecte tu profesionalidad. Construir una imagen personal que vaya acorde contigo y que te haga sentir cómoda, te va a permitir hablar a tu audiencia con seguridad, apostando fuerte por lo que eres y por lo que puedes ofrecer.
Si crees firmemente en tu marca, piensas bien los contenidos que publicas en redes, tienes (probablemente) una web con un diseño cuidado y un servicio o producto bueno, ¿por qué no le das la misma importancia a tu imagen?
Piénsalo, nadie mejor que tú para trabajarla. Nadie mejor que tú para proyectarla.