Tener una buena presencia se queda corto en la mayoría de los casos. En el fondo, lo que todos queremos es tener estilo. Es lógico, pues tener estilo va más allá de ser una fashion victim, de llevar siempre las últimas tendencias. El estilo tiene que ver con tu yo interior, con la persona que eres, está directamente relacionado con tu personalidad y tu forma de vida.
Me suelo encontrar con muchos clientes y clientas preguntándome por su estilo. La verdad es que puedo ayudarte a descubrir cuál es tu estilo, a que seas consciente de él, a encontrar las prendas y complementos más adecuados a él. Pero lo cierto es que tú, y todos, aunque no sepas muy bien cómo definirlo, tienes un estilo.
El estilo es todo lo que te rodea y, como tal, evoluciona a medida que evolucionas. Podríamos decir que el estilo es la definición de lo que eres y, por tanto, de cómo quieres que te vean los demás. No obstante, lograr eso es precisamente el principal obstáculo que veo que tienen mis clientes. La cuál cosa dificulta mirarte al espejo y verte bien, vestirte cada día sin dificultad, sentirte a gusto contigo.
Si te ves bien, te sientes bien.